Desde finales de los años setenta, época en que se inició el Régimen de Zonas Francas en Costa Rica, el país ha logrado evolucionar satisfactoriamente para que las empresas que se instalan encuentren una serie de beneficios que hagan sus operaciones exitosas, y a la vez, generan oportunidades para los ciudadanos siendo la fuente de empleo el mayor beneficio para el país.
El crecimiento en la fuente de empleo que se brinda a los costarricenses ha sido un impacto realmente positivo, según el informe de la Coalición Costarricense de Iniciativas de Desarrollo (Cinde) informó que las empresas de inversión extranjera de los sectores de Servicios, Ciencias de la Vida, Manufactura Avanzada, Manufactura Liviana e Industria Alimentaria generaron 12.000 nuevos empleos en total en 2015.
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En el mismo informe se revela que fue un año retador, pero que finalizó exitoso, el sector de Servicios y Ciencias de la Vida fueron los sectores con mayor dinamismo el año anterior, en términos de proyectos de inversión atraídos y número de empleos generados con 5.000 empleos netos de alta calidad y la instalación de 23 proyectos de inversión en el país. Por otro lado el Sector de Ciencias de la Vida reportó nueve proyectos de inversión atraídos y 2.324 empleos netos.
Sin duda alguna, el Régimen de Zona Franca ha beneficiado enormemente la economía de nuestro país, indudablemente la fuente de empleo es uno de los mayores beneficios que estas ofrecen; sin embargo, son muchas las oportunidades que este modelo brinda para estimular el progreso del país, podemos mencionar el incremento de las exportaciones indirectas nacionales, mejoras en las prácticas de gestión empresarial, aumento en las capacidades técnicas y tecnológicas de los empresarios nacionales, el país mejora su competitividad y si hablamos numéricamente podemos mencionar lo que indican estudios de la Promotora de Comercio Exterior, por cada dólar que se exonera a una zona franca estas dejan ocho dólares al país.
Otro dato que es relevante mencionar es que el país logró captar 39 proyectos, superando la meta inicial que era poder obtener 35 nuevos proyectos de inversión.
Si damos un vistazo al pasado y vemos que este régimen ha permitido un crecimiento económico y social a nuestro país, los retos que deberían plantearse hoy en día es trabajar en la mejora de condiciones que conviertan a Costa Rica cada día más en uno de los mejores destinos estratégicos para las empresas inversionistas.
Se espera que en el 2016 las Zonas Francas continúen con sus proyecciones de crecimiento y así nuestro país se vea beneficiado, miles de ciudadanos costarricenses son testimonio de que estos modelos económicos traen inversión a Costa Rica pero que además impulsa una fuerza laboral nacional ocupando puestos jerárquicos de calidad, con salarios que remuneran bien la responsabilidad a cargo y mejor aún, permitiendo un desarrollo personal.
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